Por Edgar Torres
Para Fundación Nacional para la Cultura Popular
Luis Enrique Romero, el ser humano -más allá del actor y cantante- confesó en broma y en serio que tiene “mucho” de bohemio, además de poeta y loco. “Tanto la poesía como la música me vinculan a la bohemia… Y para mirar la poesía hay una locura…”, afirmó.
Romero mencionó que el proyecto “De bohemios y locos… todos tenemos algo de poetas”, a celebrarse el domingo 1 de octubre, a las 4:00 de la tarde, en el café teatro Punto Fijo en Centro de Bellas Artes de Santurce, lo venía hablando desde hace tiempo con el declamador David Santiago para “contar la historia de nosotros como país”.
Entre ambos está el paralelismo de la pasión hacia la poesía y la música, en fin, las artes. Ellos se conocen desde hace más de dos décadas. “Nos vincula mi trabajo en ‘Cimarrón’, que dirigía Brunilda García… Además, David tenía en el sur (del País) un grupo que, de .cierta manera, se parecía mucho a la búsqueda en términos del teatro, la poesía y la música que practicábamos”, apuntó.

El veterano histrión nos respondió si sus múltiples facetas han evolucionado al mismo tiempo, o una más que otra. “Mi pasión original era la música y la pintura. De niño siempre soñé, pero la vida te va exponiendo a otras cosas y llego al teatro porque canto. Todo comienza de la mano, pero la actuación me absorbió… Llevo 35 años como actor. Claro, cuando decaían (los proyectos) en las tablas y en televisión, tomaba la guitarra y me iba a la bohemia, a cantar en negocios en el Viejo San Juan. La música no se desarrolló tanto como el actor. Sí ha habido una evolución en ambas, sobre todo, en el manejo de la guitarra que avancé un poco más”, narró.
Luis Enrique Romero profundizó, en entrevista con la Fundación Nacional para la Cultura Popular, sobre si ha recurrido a las artes como bálsamo -un respiro en una sociedad tan convulsionada- para inyectar positivismo en la gente o, más bien, para crear conciencia mediante la crítica, en búsqueda de un despertar colectivo. “Yo camino en ambas vías. De hecho, la música para mí, igual que la poesía, me transportan a una dimensión distinta, pero, también, se subliman cosas y uno busca un momento de paz… Tanto la poesía, como la música y el teatro han sido herramientas para hacer unos señalamientos. Tengo poesía contestataria, haciendo señalamientos y tratando de buscar la posibilidad de aportar ideas hacia una comunidad o familia que busca la justicia para un mejor país, para una mejor convivencia… Un respeto a la ecología, un señalamiento contra la violencia tanto hacia la mujer, como hacia la vejez y los niños. ¡Ha servido para todo eso!”, sentenció.
Aprovechamos para cuestionarle si su generación se ha preocupado por fomentar el fervor cultural en los más jóvenes. “Pienso que cada generación trabaja sus necesidades desde su perspectiva. Creo que la necesidad que tiene nuestro país va a convocar a las nuevas generaciones hacia una búsqueda de su ser. Yo viví un gran momento en teatro, cuando las salas se llenaban y luego seguías por la Isla con múltiples funciones… Ahora, aunque hay un resurgir, todavía no vemos eso que yo experimenté, que viví de la actuación, de todas las expresiones artísticas que he podido manejar. Dicho eso, creo que la generación trabaja sus necesidades conforme a su visión”, precisó.
Romero comentó, además, que anhela lo recuerden, “como un puertorriqueño que amó a su país”.
El espectáculo “De bohemios y locos… todos tenemos algo de poetas”, a cargo de Producciones Eche, contará con la participación especial del músico Enrique Cárdenas. La orquesta estará conformada por Kenneth Meléndez, Wildaliz Rodríguez, Wilfredo “Mambo” Almodóvar, Rigo Santos Irizarry, Javi Quiñones y Pucho Millán.