Por Edgar Torres
Para Fundación Nacional para la Cultura Popular
El clásico teatral “Sirena” de Francisco Arriví subirá a escena el próximo viernes 9 de junio en una versión especial del dramaturgo Roberto Ramos-Perea, quien también la dirige.
La controvertible pieza estará en cartelera como parte de las actividades anuales denominadas “De Arriví en el Arriví”, gracias al Instituto de Cultura Puertorriqueña (ICP) y el Instituto Alejandro Tapia y Rivera con su Compañía Nacional de Teatro.

Ramos-Perea destacó que la puesta en escena “es para seguir honrando la memoria del Padre del Teatro Puertorriqueño Contemporáneo. Es un homenaje que debemos hacer perpetuo. Lo que hizo Francisco Arriví por el teatro nacional no se ha repetido en muchísimos años. Fue lo que hizo Tapia en el siglo 19. Esa tarea me ha tocado por ser el custodio de los derechos de autor y todo lo que tiene que ver con la obra de Paco (Arriví). La familia delegó en mí todos los materiales de Paco. Él mismo antes de morir me había encargado cariñosamente esa misión, que el hijo me reconfirmó. Yo lo hago con mucho gusto porque fue mi maestro. La idea es que todos los años estrene en el Teatro Francisco Arriví una obra suya en la medida que sea posible y que aparezcan los recursos. El año pasado estrenamos ‘Caso del muerto en vida’ que es bastante desconocida. Este año nos toca ‘Sirena’ porque es una obra que se ha visto poco, quizás por lo controversial del tema. La denuncia que él hace, ya no contra el prejuicio racial de los blancos, que también está en la obra, sino contra el prejuicio de los negros contra sí mismos, que es lo que se conoce como el endorracismo. El negro que desprecia su raza y es capaz de hacer cosas abominables con tal de que los blancos lo acepten. Esas son denuncias bien poderosas en el momento en que Paco las hace. Esta obra se escribe en 1946, que fue la tesis doctoral de Francisco Arriví en la Universidad de Columbia. Él tenía un doctorado en dramaturgia…”.
Aclaró que en su adaptación la pieza continúa desarrollándose en 1946, pero con las preocupaciones, dolores y angustias de esta época. “El tema del racismo no se acaba nunca. Por no acabarse nunca es necesario darle nuevas visiones, refrescarlo y volverlo a traer a la discusión. No simplemente como un asunto de blancos contra negros, sino como un asunto que tiene que ver con el alma misma, con el ser mismo. La raza es definitoria de lo que nosotros somos y hemos vivido como pueblo. Esa definición de la puertorriqueñidad está atada a los asuntos de la raza”, sentenció.

El director abundó que “la discusión de los asuntos raciales cada día se torna más difícil, más álgida, más violenta. Tenemos que atacar eso, no desde los lados opuestos, sino desde el corazón, desde la visión personal del asunto, desde nuestra tolerancia, desde nuestra manera de enfrentar las diferencias. El racismo no se va a resolver con quién mata más gente. Se va a resolver con cómo somos capaces de ejercer nuestra convivencia, tolerancia y entender que la raza ya es parte de nuestra sangre. Eso no lo puede quitar ni negar nadie”.
Aseguró que si Arriví estuviera vivo -y ante todo lo que ha ocurrido con el racismo- hubiera seguido escribiendo sobre el tema haciendo mucho énfasis en la necesidad de ver sus obras. “Son las que atacan el problema racial por primera vez en nuestro país de manera directa. En el siglo 19 sí había obras que tocaban el tema, pero no tan valientes ni arrojadas, porque querían conservar la paz cultural e intelectual. A Paco eso no le importó nunca. Él estaría súper contento de que hubiéramos hecho esto, que filmáramos la película de ‘Vejigantes’ y continuemos montando sus obras. Me encargó un poco esa misión antes de morir. Yo la he hecho con todo el entusiasmo y la pasión que puedo, porque él dio su vida para que estas discusiones se pudieran dar”.
La actriz Lydia Echevarría y el fenecido productor Luis Vigoreaux fueron los protagonistas originales de “Sirena” en el montaje de 1959, bajo la dirección del propio autor. Claro que esta puesta en escena, como sucedía con todas las obras de Arriví, causó revuelo. “En Puerto Rico, sobre todo, en las comunidades intelectuales, había mucho racismo tapado. Cuando Paco destapa la olla, pues muchas personas lo rechazaron… Cuando estrena ‘Vejigantes’, una serie de personas dijo en la prensa y repitió después con ‘Sirena’ que en Puerto Rico no había racismo y que Paco Arriví lo que hacía era exagerar una situación que no tenía importancia… ¡A Paco eso le molestaba mucho! Esas críticas venían de gente de las clases privilegiadas, aristócratas, intelectuales que no entendían lo que él trataba de hacer”, apuntó.

En 1971, Idalia Pérez Garay estuvo, también, en la piel de “Marina Beltrán”, mujer mulata, sensible y enamorada que entrega su corazón a un joven engreído y blanco que solo la quiere para su placer. Al “Marina” quedar embarazada del joven, se desata un terrible conflicto donde enfrenta lo que se conoce como endorracismo. Ella decide hacer lo imposible para ganarse el amor del caprichoso joven, en la absoluta negación de sus orígenes y raza. En el elenco encabezado por Pérez Garay participaron José Reymundí y Esther Mari, entre otros actores, bajo la dirección de Dean Zayas.
Ramos-Perea mencionó que “Sirena” ha tenido otros montajes, pero más pequeños -o solo recreación de escenas- que se realizan en escuelas. En un momento dado, la obra estuvo en el currículo del Departamento de Educación, sin embargo, eligieron “Vejigantes” por ser “un poco menos agresiva”. (Señaló que solo ha visto escenas realizadas por estudiantes).
El nuevo montaje de “Sirena”, a cargo de la Compañía Nacional de Teatro del Instituto Tapia, estará protagonizado por Melissa Reyes, Israel Solla, Sonia Rodríguez, Nelson Alvarado, Cybele Delgado, Jesús Aguad, Andrea Toro y Caroline Vanessa Alicea. La producción cuenta con música original del compositor UGOH, y el toque de bombas de Nubia García. El diseño de luces es de Héctor Negrón y la producción ejecutiva de Jaycee González.

Ramos-Perea precisó, en entrevista con la Fundación Nacional para la Cultura Popular, que antes de estar en escena “Sirena” hubo un análisis del texto, tomando en cuenta las motivaciones nacionales y sociales en el contexto de la época y diferencias que atañen a Puerto Rico. “La obra es difícil de montar. Necesita unos actores bien duros en teatro. La actuación del teatro puertorriqueño es otro estilo. El elenco completo leyó el texto original de Arriví, el texto de la primera versión de 1946 -distinta a lo que se publicó- y la realizada por mí”, detalló. (Hubo seminarios para discutir línea por línea el libreto. Insistió que todos los actores conocen las obras de Arriví).
Las funciones son viernes y sábado a las 8:30 de la noche y domingo, a las 4:30 de la tarde, por dos fines de semana (desde el 9 de junio), con entrada libre de costo, como un regalo de la Compañía Nacional de Teatro del Instituto Tapia. No es necesario hacer reservaciones; para más información, puede llamar al teléfono 939 204-5076, o escribir a [email protected], visitar la página web: www.institutoalejandrotapia.org o redes sociales.
Actividades paralelas de ‘Arriví en el Arriví’ –
El programa de actividades paralelas se realizará la semana del 12 al 15 de junio, que anunciarán próximamente.
Habrá una exposición del trabajo de Francisco Arriví, un coloquio sobre sus obras de tema racial y la exhibición abierta al público de la película “Vejigantes” -basada en la obra- producida por el Proyecto Dramático Lucy Boscana de WIPR TV.