Por Vicente Toledo Rohena
Para Fundación Nacional para la Cultura Popular
Ante casa llena se celebró la edición número 51 de la Semana de la Danza Puertorriqueña –programa musical presentado por el Instituto de Cultura de Puerto Rico (ICP)- en el museo Porta Coeli en San Germán. El histórico e icónico recinto sangermeño fue el escenario de un extraordinario recital de danzas a cargo del guitarrista y compositor puertorriqueño Hermelindo Ruiz Mestre.
El intenso calor del pasado domingo (28 de mayo) en la tarde, no mermó el entusiasmo por disfrutar del manjar musical de Ruiz Mestre que contó con los guitarristas Josiane Feliciano y Kelvin Adames; y el violinista José Eduardo Vanga como invitados. Como tiene acostumbrado en cada una de sus presentaciones, el guitarrista y compositor natural de San Sebastián hechizó con su técnica y ejecutoria.

La 51ra Semana de la Danza Puertorriqueña fue dedicada de manera póstuma al maestro de la guitarra Leonardo Egúrbida Avilés (1945-2022) y al propio concertista (Hermelindo Ruiz). En el concierto el músico interpretó danzas de su autoría, y de Egúrbida Avilés, Juan F. Acosta (1890-1968), Ángel Mislán (1862-1911) y Manuel G. Tavárez (1843-1883).
Con un retraso de 45 minutos comenzó el recital con la danza de Leonardo Egúrbida ‘Los dos amigos’ donde Ruiz Mestre contó con la colaboración de Feliciano en una grata apertura que cautivó del saque al público que comenzó a llegar desde dos horas antes del concierto para conseguir sus espacios.
Igualmente, el dúo continuó con su exquisita participación en la pieza de Juan F. Acosta, ‘Migda Enid’, en donde el dúo continuó demostrando su gran afinidad y espectacular técnica. La elegancia de Ruiz y el acompañamiento de Feliciano lograron una convergencia de excelente gusto.
Una de las danzas más conocidas de Acosta, ‘Bajo la sombre de un pino’, permitió a Ruiz en solitario ofrecer galas de su talento y rico sonido. La popular ‘Sara’ de Ángel Mislán fue otro gran acierto del músico pepiniano.

El hábitat emotivo se creó al llegar el turno de la danza ‘La saltarina’ –pieza de Egúrbida dedicada a su hija Moraima- y ‘Flor de jagua’ otra pieza hermosa escrita también por el guitarrista fallecido en honor a su esposa Vilma, quien junto a su hija se encontraban en la capilla Porta Coeli disfrutando del merecido homenaje póstumo a su ser querido.
‘Un rayito de luz’ composición de Ruiz Mestre, encantadoramente acompañado por José Eduardo Vanga (violín), fue la antesala de ‘Mercedes’ una cautivadora danza que unió a Ruiz (guitarra), Feliciano (cuatro), Adames (guitarra) y Vanga (violín). Un deleitoso recital que mantuvo en total atención a los entusiastas que estaban deseosos por seguir escuchando danzas puertorriqueñas. Entre los presentes en el recital se encontraban el maestro Roselín Pabón y el genio de la guitarra clásica Iván Rijos.
Como parte de la Semana de la Danza Puertorriqueña, el maestro Ruiz Mestre ofreció un taller sobre la composición de la danza y la obra del maestro Egúrbida en la Escuela Libre de Música Ernesto Ramos Antonini de Mayagüez.
Ruiz Mestre es un destacado intérprete, que transcribe danzas conocidas escritas para piano, que adapta a la guitarra clásica. Con estos arreglos, ha llevado la danza a dieciséis países. En el 2018, grabó una danza realizada con músicos de la Orquesta de Cleveland, sala emblemática de la música clásica.

En 2014 grabó una producción discográfica reviviendo la vida y obra del compositor Juan F. Acosta que contiene 10 danzas. Las obras de Ruiz han sido tocadas por otros intérpretes en Francia, Italia, Eslovenia, China y Rusia, entre otros lugares.
Posteriormente en 2016 grabó el disco ‘Vital’, un manjar de composiciones que recorren por su trayectoria musical. El compendio de 15 composiciones son obras que las han tocado en los diferentes continentes. ‘Vital’ fue seleccionado por la Fundación Nacional para la Cultura Popular como una de las producciones discográficas más sobresalientes de 2016.
Mientras, el guitarrista y compositor Leonardo Egúrbida Avilés fallecido en 2022, ofreció innumerables recitales en los mejores escenarios de Puerto Rico. De igual forma en el Carnegie Hall de Nueva York, Venezuela, República Dominicana, Cuba y México. El concertista, compositor y arreglista fue profesor en el Conservatorio de Música de Puerto Rico por más de 40 años.