Por Edgar Torres
Para Fundación Nacional para la Cultura Popular
Mario Artcadia lleva la música en la sangre por parte de su familia y hasta intentó abrirse paso como cantante e instrumentista. Fue entonces cuando decidió expresarse mejor a través de las artes plásticas, pero sin dejar de profesar admiración por esa otra pasión. Durante su trayectoria ha realizado varios tributos en su obra plástica a distintas figuras por “puro placer”.
Desde temprana edad se fue formando en esta disciplina teniendo buenos maestros, lo que lo llevó a graduarse con honores. Completó un bachillerato en el Departamento de Pintura en la Escuela de Artes Plásticas y Diseños en el Viejo San Juan y fue becado para la maestría en arqueología en el Centro de Estudios Avanzados de Puerto Rico y el Caribe.
Desde hace aproximadamente 16 años se desempeña, también, como profesor, habiendo laborado en la misma escuela especializada donde estudió. También, estuvo como maestro de artes visuales en el Municipio de Aguas Buenas, lo que se detuvo por la pandemia del Covid-19.
Este talentoso artista de las artes plásticas es además coleccionista de discos vinilos de los años ’50, 60, ’70 y un poco de los ’80. En este último renglón indica que siente una profunda admiración por la estrella española Isabel Pantoja. Al conocer que la intérprete de “Marinero de luces” tendría un concierto en el Coliseo de Puerto Rico se dio a la tarea de desarrollar una obra conmemorativa realizada en un elepé que recicló. La pieza, hecha en acrílico, exhibe una foto que Isabel Pantoja utilizó como promoción para el concierto ‘Enamórate’, incorporando la bandera de Puerto Rico en el velo que lleva en la imagen. “Quise que esto fuese como un homenaje o tributo al estilo de cuando entregan un Disco de Oro o Platino. Como artista plástico quise otorgarle un disco de arte. Estuve tres días (en confeccionarla)”, expuso.
Mario Artcadia compró su boleto para disfrutar del concierto pero, al mismo tiempo, intentó comunicarse con la oficina local de la producción del evento. El mismo día del concierto pudo entregarla -antes del inicio- por la parte posterior del Choliseo a un miembro de la producción identificado con un carnet oficial, que le indicó que lo llamarían al final. Mario Artcadia nunca recibió la comunicación, pero le mostró a la seguridad del recinto todos los correos electrónicos para entonces tener cierto acceso. Pudo saludar brevemente a Isabel Pantoja por medio de un grupo de seguidores y ella le firmó algunos discos. En ese instante, le dijo a Pantoja, “yo fui quien hizo la obra del disco, pero ella se quedó mirándome. Su reacción fue extraña y se quedó paralizada”.
Días después, la producción del concierto de Isabel Pantoja le escribió a sus redes sociales para que hiciera otra obra igual, porque la original se había afectado por la esquina. Él se ofreció a restaurarla, pero no se llegó a nada… Por su lado, investigó dónde se estaba alojando la estrella, hasta que por medio de los estilistas de Pantoja volvió a tener contacto indirecto con la renombrada intérprete. Artcadia se dio cuenta que el acceso de la producción local del show a esta figura internacional no era tan efectiva.
Personal del “staff” de Isabel Pantoja le bajó la pieza al vestíbulo donde ella se hospedaba, dándose cuenta de que el daño era considerable. Tardó entre tres o cuatro horas en restaurarla. El equipo de trabajo de Pantoja de España estaba impactado por las condiciones en que se hallaba la obra. Todo lo que logró Artcadia para restaurarla fue, también, gracias a dos presidentas de club de fans de España que estaban en la Isla… Al fin pudo, entregar la pieza directamente a la cantante -en pocos minutos- y ella se la llevó al avión en su equipaje de mano.
Al contemplar finalmente la obra, Isabel Pantoja le agradeció su detalle a Mario Artcadia y comentó, “’es el regalo más lindo y el que más me ha gustado de todas las giras. Siempre lo voy a recordar”.
Con la foto de entrega, el artista completó satisfecho su misión. Y siguiendo su labor creativa, en estos días trabaja en una nueva obra que le ha sido encomendada sobre el inolvidable trovador y comediante Tavín Pumarejo. La misma se añadirá en mayo a su catálogo artístico el cual incluye piezas sobre los también inolvidables Felipe “La Voz” Rodríguez y Tito Rojas.