Por Alina Marrero
Para Fundación Nacional para la Cultura Popular
Este año, el actor isabelino, Edwin Emil Moró, no ha parado de trabajar y celebrar sus logros. Cuando proclamamos a Edwin Emil como actor isabelino, lo hacemos porque lleva, con mucha “zandunguería”, el sabor de su pueblo a donde quiera que va. Aunque nació en Mayaguez, el 27 de diciembre de 1984, se considera de Isabela, donde ha vivido desde que sus padres, Edwin González y Sonia Moró, lo sacaron del hospital.
Edwin Emil, es el menor de tres hermanos, y agradece su despertar escénico a su hermana mayor, Divani, que jugaba con él como si fuera una marioneta, frente al espejo. De niño, Edwin hizo teatro en cuarto grado, gracias a su maestra Ileana González, quien tenía esa pasión, ya que, según informó, su pueblo carecía de Bellas Artes.
Cuando cursaba el cuarto año de escuela superior, el joven tomó clases de teatro con la maestra Mildred Acevedo, y fue cuando decidió lo que iba a estudiar en la universidad. Esto tuvo objeción de su padre, debido a la experiencia de unas amistades que tenían hijos que estudiaron teatro. El deseaba que su hijo tuviera una carrera que fuera económicamente más estable. Pero Edwin no cedió en su pasión, así que acordó con su padre firmar en el servicio militar selectivo para que se le permitiera estudiar actuación.

Mientras estudiaba en el Departamento de Drama de la Universidad de Puerto Rico en Río Piedras, comenzó a trabajar en televisión y en teatro. Fue cuando el profesor Dean Zayas le aconsejó que en lugar de Edwin Emil González, tomara como nombre artístico el apellido de su madre y se adoptara como Edwin Emil Moró. Sus padres estuvieron de acuerdo y el estudiante acató el consejo del maestro.
Desde que lo conocemos, cuando todavía estudiaba en la universidad, Moró ha trabajado en teatro, televisión y cine con continuidad.
En este año, el actor ha dejado su calor isabelino en el continente americano, de norte a sur. ¿Se quieren enterar? Les vamos a contar.
“La pandemia fue como el huracán María, no sabíamos qué iba a pasar. El arte, que es la vida del ser humano, es lo primero que se fastidia, cuando ocurre una crisis. Los profesionales del arte, nos vemos afectados, en todo el sentido de la palabra. Sin embargo, no me fue mal. Hice cine, televisión y teatro. Un día, recibí una llamada para hacer ‘Las réplicas’, del dramaturgo puertorriqueño Leo Cabranes-Grant, que iba a estrenar en el Festival Fuerza Fest, organizado por Mario Colón para Hispanic Federation, en el Teatro Julia de Burgos, en Nueva York. Fue una gran emoción. Comenzamos a ensayar por zoom una obra que depende mucho del movimiento de una cama. Somos dos actores en esa obra y el otro, Josean Ortiz, estaba en Nueva York. Fue un verdadero reto, pero gracias al ingenio de la directora, Mariana Quiles, se logró”, manifestó.
Edwin Emil describió como hermoso el proceso de “Las réplicas”, que comenzó en primavera en la ciudad de Nueva York, tuvo acogida en el True Color Fest en el verano de Puerto Rico, y cerró en El festival de Teatro de la Igualdad en Buenos Aires, en el otoño de América del Norte y la primavera de América del Sur. Sobre esta última experiencia, nos contó con júbilo: “¡Jamás pensé que algo como eso me fuera a pasar! Ha sido mágico. Los argentinos nos amaron. Todo les gustó, el texto, el montaje, las actuaciones. Fueron boricuas que residen en Buenos Aires que quedaron encantados”.

Conforme relató Moró, fue en conversaciones que sostuvieron los integrantes de la obra “Reconversos” con Josean Ortiz, que surgió el impulso para desarrollar un festival de teatro de tema GLTBQ, en Argentina, lo cual no se daba en ese país, desde 2009.
Este año, 2022, arrancó la primera edición del Festival de la Igualdad en medio de la Semana del Orgullo, con siete propuestas de obras cortas, dos obras internacionales, un radioteatro para adultos mayores, dos actividades infantiles y talleres de temática LGBTIQ+. El evento, organizado por la Fundación Igualdad, se dio en distintos espacios, entre el lunes 31 de octubre y el viernes 4 de noviembre. Las funciones, libres de costo, se dieron en el Centro Cultural Borges, el espacio cultural El Sábato y el Centro Cultural San Martín. Otras actividades se realizaron en la sede de la Fundación Igualdad. El festival contó con la coordinación de Paul Caballero, colombiano que reside en Buenos Aires desde 2002, autor, actor y director de la obra “Reconversos”.
Según dijo Télam Pedro Paradiso Sottile, presidente de Fundación Igualdad, en distintos medios, el festival pretende contribuir a promover los principios y valores de la Fundación que representa, con una perspectiva de género, derechos humanos y diversidad. Se espera que el mismo, se lleve a cabo también en Nueva York y Madrid.
Las obras presentadas fueron “Mi grito” de Roma Alejo Bazzi, “La maju” de Fabián Perez, “Ojos inquietos” de Jerónimo Nahuel Morales, “Así como volando” de Diego Morales, “Ava” de Paul Caballero, “Prometiste” de Sandra Benigno (Gandhari), “Maní nigeriano” de Santiago Kuster y Juan Ignacio Fernández, “Bola de Nieve” de Josean Ortiz, “Las réplicas” de Leo Cabranes-Grant, “De este lado del corazón” (radioteatro) de Edgardo H. Corts, y una serie de talleres para niños y adultos.
“Nuestra obra se presentó el 3 y 4 de noviembre en El Sábato, un espacio teatral en la sala China Zorrilla. Fuimos los únicos en presentarnos en esa sala. Nos encontramos en Buenos Aires con Carlitos González y Joel Rodríguez, el productor de Angeles del Fin. De la producción, además de Josean Ortiz, estaban Linda Rivera, la directora Mariana Quiles y el escenógrafo, Alejandro Cirilo. También estuvo el autor Leo Cabranes-Grant, quien vio la obra por primera vez en Buenos Aires”, informó Edwin Emil antes de confesar, con mucha tristeza, que no pudo ver el trabajo de otros grupos porque llegó justo para hacer sus funciones, y se presentaban, prácticamente, todos a la vez.

En días recientes, le entregaron a Edwin Emil Moró, el premio que ganó como actor en el Fuerza Fest de Nueva York. “Josean Ortiz y Leo Cabranes-Grant también ganaron premios en el Fuerza Fest, y Mariana Quiles ganó el premio de la mejor dirección por esta obra en el True Color Fest en Puerto Rico. Me siento tan orgulloso de haber sido parte de este proyecto”, comentó.
Edwin Emil Moró, quien de 2010 a 2018 fue parte de la programación local que ofrece Wapa Televisión: “Risas en combo”, “Pégate al mediodía”, “Entre nosotras”, “Viva la tarde” y por último “Juntos en la mañana”, también trabajó como escritor y director de segmentos en dichos programas. Luego de culminar esa primera etapa, comenzó a ser parte de la nueva programación de Mega TV, donde fue parte de los programas “Los HP” y “Los desempleados”. Este último programa surgió en la pandemia y lo hacían desde las casas para las redes streaming. Cuando “Los HP” salieron del aire, después de un descanso, Edwin Emil comenzó a trabajar en “La bóveda” de Teleonce, donde permanece hasta el sol de hoy.
Otro de los logros que nuestro actor isabelino ha celebrado es el éxito de la película “Karaoke”, que estrenó el pasado 19 de mayo en Caribbean Cinemas, y la cual co-protagonizó.
“Esta película fue un reto bien grande, porque se hizo cuando comenzó la pandemia, en 2020. Tuvo muy buena acogida. Ganó el primer premio en el Luscas Film Festival en Caribbean Cinema de ese año. Ganó ese premio sin haberse estrenado y sin el cariño entero de post producción”, Edwin reveló.

Pero no es “Karaoke” la primera película que hace Edwin Emil Moró como actor. “Lo primero fue ‘Marcelo’, después ‘El quinceañero de mi abuela’, después ‘Karaoke’, entonces ‘Los dominirriqueños, Parte Tres”. Pronto estrenarán ‘Los Foodtrukeros’ y ‘Martita’. No dejen de verlas”, informó.
Edwin Emil Moró le pide a la existencia vivir de lo que ama, ya que con eso es feliz. Entre el cine, el teatro y la televisión prefiere los tres medios, porque, a pesar de ser diferentes, los disfruta a cabalidad. Le encanta también su faceta de escritor de libretos de televisión. Aspira a dirigir teatro, a dirigir cortometrajes, y tiene una aspiración ardiente en su corazón: “Quiero que nos respetemos como artistas, que el público valore más al local, ese es mi grito de lucha. Me molesta tanto ver actores veteranos que la gente no reconoce. Soy simple y minimalista, me alegra que haya trabajo y que tenga taller”.
Para concluir, le pedimos a Moró que compartiera algún pensamiento propio sobre la actualidad puertorriqueña, a lo que sin reparos contestó: “Puerto Rico es tierra de grandes seres humanos. Estamos caminado por senderos irregulares, pero se que todo se va a arreglar. Soy un optimista que no se detiene. También soy realista. Lo que me preocupa es que siento que estamos todavía en décadas anteriores, en el sistema de educación. Aunque estamos muy tecnológicos, nos hace falta evolucionar”.