Por Vicente Toledo Rohena
Para Fundación Nacional para la Cultura Popular
La música es parte de su diario vivir desde la infancia, producto de la fuerza y respaldo incondicional de unos progenitores que alentaron siempre la pasión. Un amplio y heterogéneo trasfondo musical adicionó versatilidad a su talento como vocalista, capaz de permitir que Carola Ausbury exponga con gracia, el más puro de los sentimientos sonoros.
“La música es reflejo del alma. Cuando canto y hago música me llena de sentimiento… Es mágico, porque se tiene ese contacto con la gente que genera los sentimientos más puro del ser humano. Puedo decir, que todo esto es producto de la música… Un sentimiento que nace sincero y puro”, expresó elocuentemente la cantante Carola Ausbury.

Inmersa en el mundo de las artes, especial en el jazz, estudió técnica vocal clásica con la profesora Hilda Ramos. Además, se reforzó con múltiples talleres de jazz -vocalmente- en University of Massachusetts con Sheila Jordan y Marion Cowings; el programa de Berklee en Puerto Rico -del Berklee College of Music de Boston- y en la Universidad de Puerto Rico, donde fue cantante de la banda de jazz de la UPR, Río Piedras, bajo la dirección de los destacados músicos y maestros Samuel Morales y William Cepeda.
“Mi padre – el profesor y contrabajista Dan Ausbury- logró identificar desde que era pequeña, mi interés por la música y comencé a tomar clases privadas con Hilda Ramos. Bajo su tutela me adentré con un repertorio clásico, algo fantástico para tenerlo como base”, recordó con mucho sentimiento la vocalista, que también ejerce como maestra de inglés.
Mientras cursaba la escuela superior, ya su padre, buscaba rutas educativas hacia dónde dirigir musicalmente a su hija.
“Quería exponerme y llevarme hacia el jazz vocal. Fue al Conservatorio de Puerto Rico y habló con el educador y director del Departamento de Jazz y Música Caribeña, Andrew Lázaro, que comandaba un big band. Él, fue que le recomendó a mi papá que creará el espacio o su propia banda para que yo pudiera cantar y exponerme. Mi papá formó el grupo ‘La caravana del jazz’ que en nuestras presentaciones musicales comenzábamos y terminábamos con el clásico de jazz, ‘Caravan’, detalló Carola, que mientras todavía estudiaba en la escuela superior, cantaba los miércoles en Carli’s Café.
A partir de ese momento, la vocalista se ha dedicado al género del jazz e integra en su repertorio boleros y bossa nova como su idioma y expresión musical. Entre los músicos con los que ha colaborado se encuentran el pianista Luis Marín y el trompetista Humberto Ramírez.

“Soy privilegiada de tener cerca personas y músicos maravillosos como Luis Marín y Humberto Ramírez. Como como intérprete del género trato de dar y aportar lo mejor de mí, todos los días. Lo hago con el mayor respeto. A Luis Marín fue el primero que conocí… Realicé un tributo a Ella Fitzgerald -reina del jazz norteamericana 1917-1996- en Punto Fijo y le pedí que fuera el director musical. Sin saber quién yo era accedió rápidamente y me dijo sí. Así es Luis. Siempre apoya a los nuevos talentos y a la juventud. Mientras con Humberto participé con su música en el restaurante Yerba Buena, en los lunes de jazz. Eso fue una escuela grandísima para mí”, explicó refiriéndose los Big Band Monday’s en Condado, San Juan donde rindió homenajes a la inolvidable Fitzgerald, Barbra Streisand, e interpretando un repertorio de boleros y filin.
De igual manera, formó parte del disco de Ramírez, ‘Bohemia Jazz’, que contó con artistas como Chucho Avellanet, Nydia Caro y Andy Montañez, entre otros.
La talentosa cantante ofrecerá al público el concierto Carola Ausbury Big Band este domingo 15 de mayo a las 6:00 de la tarde en la Sala Sinfónica Pablo Casals en Santurce.
“Será una ocasión muy especial… Es un gran honor la invitación para este evento que celebra los 90 años de Pro Arte Musical y se aprovecha el momento para rendir un homenaje merecido al maestro y músico Pedro Rivera Toledo. Será toda una celebración con mucha alegría y buena música que nos llenará el alma. La dirección musical y la mayoría de los arreglos son del pianista Luis Marín. Disfrutaremos de un repertorio de jazz a lo Big Band, lleno de swing, boleros, bosa nova y jazz latino”.
