Por Vicente Toledo Rohena
Para Fundación Nacional para la Cultura Popular
La creatividad artística de José ‘Cheo’ Arce no tiene tiempo para descansar. Fluye desde diversos puntos, como productor, arreglista, compositor y pianista. El dinamismo y enfoque por crear música, lo distingue indiscutiblemente entre los mejores. Un músico de excelencia y calidad que nunca se olvida de la palabra humildad.
Tal y como otros artistas, Cheo recibió duros golpes a causa de la emergencia provocada por la pandemia. Luego de un tiempo dirigiendo una orquesta en un hotel de Isla Verde, donde acompañaba a salseros como Pichie Pérez y Luigi Texidor, la actividad se detuvo.

“Actualmente, me estoy dedicando más a lo que es la producción y la realización de arreglos para diferentes cantantes y distintas orquestas. También, me enfoqué en terminar un disco que espero esté disponible ya para el mes de junio. Ocho temas de mi autoría, que arreglé con mucho sabor. Han estado saliendo como sencillos y han gozado de buena aceptación. Temas bien sabrosos de salsa dura y tradicional”, comentó el pianista que está trabajando en arreglos para su hermano, Agustín Arce.
Varios de los temas se están escuchando en las plataformas digitales y el disco en físico plasmará las canciones para la posteridad. Entre los cortes que presentará la producción discográfica se encuentra ‘Esa mulata es candela’ vocalizado por el recientemente fallecido, Ismaelito Rivera.
“Estuve como siete años con una banda en Hotel Intercontinental y acompañaba a diferentes cantantes… Ismaelito cantó varias veces conmigo, y como estaba en la de hacer un disco con cantantes invitado, me dijo que sí y esta fue su última grabación”, dijo Arce.
En ‘Esa mulata es candela’ el heredero del “Sonero Mayor’ legó sabor y buena espontaneidad en los soneos con su particular maña y calle.
“Lo que experimentamos en el estudio de Papo Sánchez fue algo bien sorprendente. Ismaelito me había dicho que sí, para cantar el tema, pero no había escuchado el arreglo terminado. Cuando escuchó la introducción de piano y bajo, me dijo eso se escucha bien chévere. Allí mismo se aprendió la canción y los soneos… Los plasmó de una sola vez y no estaban escritos. Como decimos en nuestro argot, la colocó en la China de una sola vez. Un sentimiento brutal”, recordó con nostalgia el pianista.

‘No te vayas’ en la voz potente de Pedro Brull y otro rico arreglo de Cheo; ‘Pensándote’ con el cantante Kevin Gabriel; ‘Salsa na’ma’, ‘Yo quiero amarte’ y ‘Me equivoqué contigo’, son algunos de los temas que vienen en la producción, donde también participa el cantante de la orquesta Ángel Pérez y Fernando Mercado.
Durante el tiempo de encierro, produjo el disco ‘Piano romántico tropical’ donde expuso una propuesta de piano instrumental con boleros y piezas bailables.
“Con la experiencia de haber participado con tantas orquestas de salsa y realizar tantos arreglos de salsa, este proyecto fluyó a uno romántico y con posibilidad para bailar”, destacó el músico que laboró con diversos cantantes y orquestas como Justo Betancourt, Domingo Quiñones y Andy Montañez.
Clásicos de Rafael Hernández, Tito Henríquez y Bobby Capó, entre otros, logró la aceptación del público, lo que llevó a la producción de un segundo volumen.
El músico natural de Coamo estudió piano con Cecilia Talavera y Ernesto Sánchez; y se inició en la música de la mano de su hermano, el recordado Agustín Arce y su Nuevo Sonido. La aventura frente al piano comenzó cuando tenía 14 años.
“A principio de los 70 (1970) junto a mi hermano Agustín era ‘fuego a la lata’. Tenía solo 14 años… Estuve como cuatro años en la orquesta y en ese tiempo, mi mamá me llevaba desde Coamo a tomar clases los sábados al Conservatorio de Música. Escuchaba mucho los discos de Noro Morales, Eddie y Charlie Palmieri… Mi hermano me compraba discos y me decía escúchate eso y aprende. En 1970 comencé a tomar clases con Papo Lucca, que es mi mayor influencia y maestro”, expresó.
Por cinco décadas, Cheo Arce ha soñado, vivido y disfrutado de diversas experiencias sonoras que lo relacionan con la buena y sabrosa música.