Por Edgar Torres
Para Fundación Nacional para la Cultura Popular
La pandemia del Covid-19 puso grandes desafíos en el camino del talentoso cuatrista Luis Sanz, al ser parte de los profesores del Departamento de Música Popular de la Facultad de Estudios Humanísticos de la Universidad Interamericana. El artista ha brindado sus cursos por las plataformas digitales del Recinto Metropolitano.
Explicó que ya había diseñado sus clases de Cuatro Puertorriqueño, Teoría y Solfeo, y Apreciación de la Música para el formato presencial. A esto se le suma, que fundó el Conjunto Criollo de la Universidad Interamericana, con estudiantes que tocan tres cubano, cuatro puertorriqueño, guitarra, bajo y bandurria. “Tuvimos entonces que adiestrarnos. Como soy del Departamento de Música Popular fui buscando la manera de enseñar a través de las plataformas Blackboard y Microsoft Team… Otro proyecto fue que la rectora y el presidente me seleccionaron para grabar para televisión el curso completo de Apreciación de la Música. Si es una aportación para la institución, siempre voy a estar dispuesto y acepté. Ha sido bien interesante porque es tú dar la clase, pero con el ambiente de producción, cámaras y luces. Se (transmitieron) a través de ABC Puerto Rico y se subirán todas las clases al canal de YouTube de la Universidad Interamericana”, manifestó.

El profesor Sanz enriqueció sus clases invitando recursos, como músicos de la Orquesta Sinfónica, del Conservatorio de Música, una coreógrafa acompañada de una bailarina de ballet para enlazar los movimientos corporales con las técnicas de la música del romanticismo, y hasta el director ejecutivo de la Fundación Nacional para la Cultura Popular, Javier Santiago. Resaltó estremecido que lo invitó para su última clase (25 de mayo), porque “Javier Santiago es una persona a la que le tengo mucho respeto, porque ha visto mi trayectoria desde niño”, apuntó
Al ser entrevistado por la Fundación Nacional para la Cultura Popular en los últimos días del curso televisado por ABC Puerto Rico, Sanz subrayó complacido que “sé que lo están disfrutando. No es tan solo estudiantes de están matriculados en la Inter, sino que hasta mis abuelos, mis padres y amistades toman el curso. Ha sido bonito porque me escriben preguntas”.
Ya van casi dos años desde que el talentoso cuatrista se desempeña como profesor en la Universidad Interamericana. Sobre la experiencia, comentó que “ha sido trabajar en un ambiente de constante aprendizaje. Dentro de su conocimiento uno llega preparado al salón, pero también se nutre de esas preguntas de los estudiantes. Yo fui estudiante y lo sigo siendo. Terminé la maestría en mayo de 2019 y en agosto comencé como profesor. Regresé a la Isla como profesor en la Universidad Interamericana. Yo fui estudiante en este recinto. Fue diferente y me sentía un poco raro, porque los que eran mis profesores (de bachillerato), ahora son mis colegas. Ese cambio fue bien interesante”. Añadió que “estoy en un momento de mi vida que continúo aprendiendo y con los proyectos que realizaba mientras estudiaba. Es una etapa de mi vida de crecimiento para continuar con otros prefectos con esa temática de investigación.”

Mencionó sobre el Conjunto Criollo de la Universidad Interamericana que está formado por estudiantes que tocan tres cubano, cuatro puertorriqueño, guitarra, bajo, bandurria. En las pasadas semanas tuvo que reunirlos de manera presencial, siguiendo todos los protocolos de bioseguridad, porque los notaba un poco desanimados ya que necesitaban tocar sus instrumentos. “Nos reunimos en salones grandes con distanciamiento… ¡Le cambió el rostro a los estudiantes!”, afirmó.
-Como profesor joven, ¿cuán importante es para su generación que aprendan a conocer la historia de la música, que conozcan los instrumentos más allá de tocarlos?, quisimos saber.
-“Todo músico debe conocer sobre la historia para así no repetirla. Si va a hacer esta composición, tienes que estudiar quién creó ese estilo, ese género, si lo hace en uno en particular. Como artista/profesor siento esa responsabilidad de primero compartir el conocimiento y dejar un legado a futuras generaciones. Por eso, tuve ese interés desde niño de educarme, de buscar los mentores, de continuar esa formación. La música es un constante aprendizaje”, dijo.
-Pero, ¿nota ese interés en ellos, más allá de poseer o desarrollar una habilidad de tocar un instrumento?, insistimos.
-“Fíjate que sí. Lo he presenciado. Uno debe partir desde ese interés. Si vas solo a la historia, se te salen del curso. Tengo que partir desde ese interés para que el estudiante entre en un proceso de experiencia en que el profesor es la persona que le va a compartir las herramientas. Pero, el estudiante tiene que ejecutar, que buscar la información. Debe haber ese esfuerzo de preguntarse, ‘por qué, de dónde es que viene lo que estoy tocando..’ Ese interés es lo que ayuda a crecer como profesional y ser humano”, explicó.

-Se cumplirá en noviembre cuatro años de que su instrumento sonara en el mundo, le comentamos. ¿Cuánto le marcó que durante la participación estelar de René Pérez (Residente) en los Premios Latin Grammy en Las Vegas, Nevada, con el tema “Hijos del Cañaveral” se resaltara su intervención musical con el cuatro puertorriqueño, mencionándolo hasta por su nombre? ¿Fue verdaderamente un trampolín en su carrera?
-“Cuando me hizo el acercamiento René fue mucho antes del huracán María (2017)… Ese momento para mí fue bien importante. Fue una expresión de nosotros como puertorriqueños, pero también como jóvenes que estamos trabajando, estudiando día a día para echar hacia adelante. Esa canción recoge esa resiliencia del puertorriqueño. Sé que de aquí a 15 años o antes ese momento en diferentes libros de historia de la música va a ser incluido, porque marcó y marca una generación. No tan solo en el aspecto musical, sino una generación del puertorriqueño de hoy día”, puntualizó.
Ante la apertura de los escenarios –
Ya Luis Sanz confía en que puedan abrirse más los escenarios para compartir nuevas propuestas. Mientras ha estado ofreciendo sus clases universitarias, también va llenando su agenda con grandes proyectos, entre los que sobresalen colaboraciones. “Tengo ese deseo de compartir con la gente música nueva, música sincera. Por estas experiencias de la pandemia ha sido un poco difícil porque estamos a través de unas pantallas. Pero, detrás de esa pantalla está la parte humana y esa es la que los artistas queremos llegar y, sobre todo, sentir”, culminó diciendo Luis Sanz.