
En la víspera de la llegada a nuestras costas de la tormenta Dorián, un grupo de colegas y amigos se dieron cita en CinemaBar 1950 en el Viejo San Juan para distinguir al cineasta boricua Jacobo Morales, designándole una sala con su nombre.
Convocados por Tito Enríquez, propietario de CinemaBar 1950, figuras de la ambiente artístico y del séptimo arte como Ivonne Belén, Alga Rivera, Pedro Muñiz, Flora e Idalia Pérez Garay, Roberto Vigoreaux, Marilú Carrasquillo, Benito de Jesús hijo, entre otras, asistieron a la distinción.
“Es un honor y satisfacción que estimula un gran sentido de compromiso para con el pueblo. Si algún sentimiento me colma es la satisfacción de ser útil. Es ese compromiso social que se traduce en respaldo en una satisfacción incomparable. Esta experiencia la agradezco a nombre de Blanca y mío”, expresó Morales, con la humildad que le caracteriza, en un aparte con la prensa.
Agregó que, ha recibido muchas distinciones en diversos lugares, pero que sea un mexicano residente aquí en nuestra Isla, es un gran honor, refiriéndose a Tito Enríquez de CinemaBar.
Morales relató que lleva activo en la industria del entretenimiento desde los 14 años. Fue en 1959 que tuvo su primer encuentro con un micrófono en la radio y desde ahí supo lo que quería para su vida, estar en este mundo del espectáculo.

“Siempre supe que yo quería esto (como actor, productor, en dirección) en lo que fuera. A los 15 conozco a Blanca y desde siempre fue mi estrecha colaboradora y consultora en estos 70 años de oficio. Un artista nunca se gradúa; es un eterno estudiante. Mucho más cuando se tiene un ojo crítico como Blanca. Que este reconocimiento haya sido en vida cobra un gran significado adicional, ya que me estimula para seguir adelante y combinando la gestión artística con lo máximo para nuestro pueblo”, afirmó el cineasta boricua gestor de producciones fílmicas como “Dios los cría”, “Nicolás y los demás”, “Linda Sara”, “Ángel”‘ y “Lo que le pasó a Santiuago”.
José Artemio Torres, director del Festival de Cine Internacional de San Juan, dio la bienvenida para luego presentar a Jacobo, quien en compañía de su inseparable conspiradora Blanca Silvia Eró agradecieron a los presentes por su apoyo y amistad en todos estos años ante una ovación en pie de los asistentes. Tito Enriquez invitó a todos a presenciar la develación de la placa que designa la sala con el nombre de Jacobo Morales. Luego los invitados ocuparon sus asientos para ver “Lo que le pasó a Santiago”, a 30 años de su estreno.
CinemaBar 1950 ofrece una variedad de auténtica comida caribeña con un toque especial en cada plato. Excelente servicio a cada mesa con la mejor vista del Morro y al Océano Atlántico si gusta relajarse en las mesitas al exterior.