Por Luis Ernesto Berrios
Para Fundación Nacional para la Cultura Popular

El municipio de Morovis y su alcaldesa, Carmen I. Maldonado González, celebraron con una emotiva fiesta de pueblo, los 101 años de vida del cuatrista, Don Iluminado Dávila Medina.
La festividad, donde fue exalta la figura del longevo moroveño, comenzó con la develación de un mural en mosaico de su retrato, en el Centro de Bellas Artes que lleva su nombre. La obra de arte, llena de colorido y minucioso detalle artesanal, fue confeccionada por los artistas mosaístas Chary Santos y Jorge Barreto. Y en una muestra de reconocimiento de pueblo a la extensa y fructífera labor del músico fue auspiciado por Edwin Ortiz Soto de Supermercados Selectos de la Municipalidad.
Don Iluminado Dávila Medina, quien estuvo acompañado por su hija Milagros Dávila Sillart y otros familiares, fue recibido con música, vítores y algarabía por parte de sus compueblanos. De esta forma la Plaza del Quinto Centenario de Morovis se convirtió en el escenario de un pintoresco festejo de pueblo en honor al músico centenario.

“Siento un agradecimiento enorme. Me siento honrado de que el teatro del Centro de Bellas Artes de Morovis lleve mi nombre. Ahora tiene un mosaico al frente con mi imagen y el cuatro, lo que me hace muy feliz. Es un honor que me hayan dado este reconocimiento en vida para poderlo disfrutar, porque después de muerto solo lo puede disfrutar la familia”, dijo el homenajeado ante el mural develado en el Centro localizado en la carretera PR 55, esquina calle del Carmen.
“Yo nunca he vivido fuera de Morovis y nunca saldré de aquí porque amo mucho a mi pueblo. Y sé que aquí también me quieren hasta los jóvenes”, añadió Dávila Medina en tono de orgullo y reafirmación de sus raíces.
En entrevista para la Fundación Nacional Para la Cultura Popular, Don Iluminado contó cómo nació su amor por el instrumento nacional puertorriqueño.
“Me encanta escuchar tocar el cuatro. Aunque un momento tomé clases para aprenderlo a tocar fue mi padre mi mejor maestro. El tocaba cuatro y también los construía. Así aprendí a tocarlo encordado a la derecha, como lo hacen los zurdos; al revés”, sostuvo sobre su aprendizaje y desarrollo de la técnica como cuatrista.

La labor de décadas realizada por Don Iluminado en la música puertorriqueña ha sido reconocida más allá de los límites territoriales de Morovis. De hecho, fue en 2001 que José Antonio Rivera – conocido en el ambiente musical como “Tony Mapeyé”- editó la obra discográfica “Los cuatro del Blasón” en el que se destacó la aportación de Dávila Medina a la música. Dicha producción fue resaltada por la Fundación Nacional para la Cultura Popular como una de las más sobresalientes del año.
“De principio a fin es el pueblo de Morovis el elemento dominante en esta obra musical. De Morovis son los artistas; de Morovis sus composiciones y propuestas. Es el cuatro el instrumento que predomina en su escudo. Y como tal la leyenda viviente de don Iluminado Dávila Medina se documenta en este proyecto ejemplar, donde el propio homenajeado – a sus 90 y tantos años – toca el cuatro y dirige. Mazurcas, danzas, pasodobles, vals y marumbas marcan el repertorio de los compositores moroveños Pascual Meléndez, José y Baltasar Rodríguez y el patriarca de los Peña: Don Juan Peña”, reseñó la organización cultural sobre la obra.
Consejo para la lograr longevidad –

El carismático cuatrista reveló el secreto alimenticio que lo ha llevado a alcanzar sus 101 años de vida en buena salud y manejando su propio automóvil.
“Mi alimentación siempre ha sido sana: arroz, habichuelas, pollo o gallina del País, viandas y bacalao. Mi esposa Gladys siempre estuvo pendiente de que mis comidas fueran sanas y lo más ricas posible. Otra cosa, nunca fumé ni bebí, a pesar de ser músico y bohemio. Todas esa cosas, unidas sobre todo a mi creencia en Dios y mi fe en la Santísima Virgen, a quienes nunca le fallo, me han permitido vivir hasta los 101 años que hoy celebro”, enfatizó en gesto de agradecimiento a lo Alto.
El homenajeado, quien también disfruta de las peleas de gallos y tiene licencia de juez de valla en diferentes galleras de Morovis, fue preciso y firme en su consejo para todas las personas que deseen llegar al siglo de vida.
“Mi recomendación es no fumar, no beber y tener puesta la fe en Dios y en la Virgen. Amen lo que le guste hacer como yo, que amo profundamente la música. Todo esto es lo que me ha ayudado a echar pa’lante a mi familia”, concluyó en tono campechano Don Iluminado Dávila Medina: leyenda viviente de la música contemporánea.