Por Jaime Torres Torres
Para Fundación Nacional para la Cultura Popular
El Teatro Taboas, en Manatí, fue escenario de la más reciente representación del monólogo “Lolita” de la actriz Viviana Torres Mestey.
La pieza, escrita por el padre de la actriz Waldo Torres, recorre las tablas de la Nación en el año del centenario de la heroica patriota lareña Lolita Lebrón.

La proyección de vídeos de los discursos de Lolita, los testimonios de su hermana y algunos ex prisioneros políticos y, en particular, las memorias de su compañero don Rafael Cancel Miranda sobre el ataque al Congreso de Estados Unidos el 1 de marzo de 1954, son el prólogo ideal de la representación que discurre en la prisión federal en que estuvo privada de su libertad por más de 20 años.
Aunque el texto no ha sido alterado y la pieza conserva su estructura narrativa, la novedad es la incorporación de la cantautora Norenid Feliciano. No solo canta, toca la guitarra y el cajón, sino que actúa tejiendo y desplazándose acompasadamente por la escena, como un complemento a la extraordinaria labor histriónica de la protagonista.
“La música y las melodías son composiciones mías […] Esto ha sido un reto muy interesante porque es la primera vez que trabajo en una producción teatral actuando. Musicalicé la pieza. Nunca había participado en una pieza como esta y no tengo entrenamiento actoral alguno. Así que he aprendido un montón, por lo que estoy muy agradecida a Viviana por la invitación a este proyecto”, dijo Nore a este medio digital justo después de finalizada la función.
Las convicciones de Lolita, su celosa pasión y profundo amor patrio; su integridad nacional y su capacidad de lucha y sacrificio por la liberación de Puerto Rico, subyugan al espectador promedio.

Las escenas de la radiación a que estuvo expuesta; su rebelión ante los atropellos del patrono patriarcal de la factoría en que trabajó y los pormenores de su irrupción armada a la cámara de representantes del Congreso; su admisión de los hechos por la sencilla razón de lucha por el respeto a la integridad de su Patria y su religiosidad, evidente en el rezo del rosario, recrean el carácter irreverente de la heroína y documentan en el teatro uno de los acontecimientos emblemáticos de la lucha por la liberación de Puerto Rico del yugo imperial.
Hace alrededor de seis años que Viviana Torres recorre las tablas de la Nación con el monólogo “Lolita”. Al recibir la invitación para ir a Cuba y coincidir con la conmemoración del centenario de Lolita Lebrón, Viviana reformuló la pieza.
“La había presentado en sobre 30 funciones y quiso refrescar la pieza con una reinterpretación del monólogo. Entonces, decide invitarme. Al principio iba a ser solo eso. Pero luego el director Efraín Rosa me dijo que necesitaba integrarme para no desperdiciar la oportunidad”, ilustra Nore.

Su rol, aparte de tocar la guitarra y cantar, consiste de la representación de un personaje complementario conocido como “Patria”. “Es como la idea de su País; un poco también soy su conciencia… Como ella está en prisión, yo estoy todo el tiempo con ella, pero ella no me ve porque soy una idea o la fuerza que la acompaña”.
Fue una puesta en escena dramática, de un texto que interpela conciencias, en momentos en que la Nación es secuestrada por una junta de control fiscal.
Los créditos incluyen a Efraín Rosa en la dirección artística; Alberto Mateos como regidor de escena y Pablo Valle en la producción general.
“Estamos haciendo estas funciones durante estos meses y el verano para recaudar fondos para nuestra visita a Cuba en el mes de julio para representar a Puerto Rico en la celebración del centenario de Lolita Lebrón”, apuntó la actriz Viviana Torres.