Por Edgar Torres
Para Fundación Nacional para la Cultura Popular
La primera actriz Luz María Rondón disfrutó de principio a fin del lanzamiento de la producción “Cantar de poetas” del actor, cantante y director teatral Miguel Diffoot en la sede de la Fundación Nacional para la Cultura Popular en el Viejo San Juan. Y antes de que el intérprete presente este viernes la producción en la librería El Candil en Ponce, no tuvo reparos en expresar el impacto que en ella ha causado.

“Estuve gozándomelo como nunca. Yo salí muy contenta de esa actividad. Me invitaron porque Miguel había hecho un disco y tendría un concierto. Yo esperaba oír canciones de las que (interpreta) todo el mundo. Cuando escucho esos poemas musicalizados quedé como buen ‘shock’. ¡Eso sí fue una noche de arte! Para mí fue algo muy especial, porque soy una amante loca de la poesía de toda mi vida. Estos son poemas conocidos por uno, oírlos en su voz y con arreglos musicales hermosísimos… ¡Yo quedé atónita!”, indicó estremecida.
Rondón asistió acompañada de su nieto, porque la presentación fue nocturna. “El público estaba absorto. Había ese silencio. Mirabas el rostro de la gente y notabas que estaba envuelta en el arte, con la música. ¡Los arreglos musicales fueron sublimes!”.
La artista aplaudió la selección de los poemas por parte de Diffoot. “Fue espectacular. Hubo mucha gente conocedora del teatro. La velada fue bonita, primero por la selección del arte, y segundo, el público lo recibió bien. Allí no había distracción de nada”, manifestó.
Miguel Diffoot musicalizó 13 poemas en este su debut discográfico: “Menos tu vientre” de Miguel Hernández, “Amor niño” de José de Diego, “La niña de Guatemala” de José Martí, “No digas más” de Angelamaría Dávila, “Canción amarga” de Julia de Burgos, “Desplume de lo triste” de Ángel Antonio Ruiz Laboy, “Hay un país en el mundo” de Pedro Mir, “El pozo” de Luis Palés Matos, “No te quiero/Soneto LXVI” de Pablo Neruda, “Las manos del campo” de Antonio Cabán Vale, “Caja de música” de Jorge Luis Borges, “Pequeño vals vienes” de Federico García Lorca y “Es tan poco” de Mario Benedetti.

Difoot grabó la producción con el acompañamiento de Jomel Rivera en la guitarra y Javier Calzada en la percusión. Algunas de las canciones fueron arregladas musicalmente por Rivera y por el propio artista; otras conservan los arreglos originales.
“Fue una velada de arte de verdad. Quedé fascinada…”, insistió Luz María Rondón, quien considera que a Miguel Diffoot le favorece en esta faceta de cantante toda su trayectoria en el teatro.
Puntualizó, “hubo mucha verdad en el espectáculo. Él es un trabajador, un estudioso. Lo conozco principalmente como actor, porque he trabajado muchas veces con él. Sé que canta, pero no lo había visto de lleno en esa faceta… ¡Se la comieron!”.
Rendón describió como encomiable que la Fundación Nacional para la Cultura Popular ayudara a Miguel Diffoot en la producción del disco. “Miguel estaba hace tiempo con la idea de hacer el disco, pero eso cuesta y los actores no estamos para ese tipo de gastos. Entonces, Javier Santiago y la Fundación Nacional para la Cultura Popular pudieron darle una mano. ¡Qué bueno porque el trabajo es muy válido!”, precisó.
De hecho fue en la Fundación donde el actor ponceño tuvo sus primeras presentaciones públicas como cantante hace poco más de una década. Según Diffoot ha informado, esa primera oportunidad se dio al ser reclutado por Bayoán Ríos Escribano – del grupo Tepeu – para una edición de las recordadas Noches de Peña. Posteriormente también se unió a las ediciones de ¡Vive la Bohemia! que allí produce Julio Enrique Court.

La experimentada artista sentenció que al subirse al escenario un actor no solo debe entretener, sino también educar. “Cuando tú educas con buenos trabajos de literatura estás haciendo una labor más importante que solo entretener.. Es bien válido y debería hacerse con más frecuencia. No solo musicalizar poesía, sino también hacer recitales de autores reconocidos, como también talleres de literatura”, sostuvo.
Por otro lado, Rondón afirmó que lleva más de cinco décadas activa “trabajando sin parar”.
Recalcó con orgullo, “tengo 85 años… Acabo de llegar de Nueva York de hacer ‘Caribe Bestial’. Nos fuimos a Nueva York al Teatro Julia de Burgos y tuvimos mucho éxito. El grupo de Teatro Hispano de Nueva York ya había vendido las funciones. Nos fue muy bien”.
“Mis hijos me dicen, ‘tú no vas a parar nunca’. Mientras yo memorice, no tengo que parar. Gracias a Dios yo memorizo todo muy bien… Ya las viejitas de mi edad se murieron”, culminó diciendo a carcajadas.