Por Jaime Torres Torres
Para Fundación Nacional para la Cultura Popular

La joven cineasta Verónica Ortiz Calderón, nueva semilla del séptimo arte puertorriqueño, estrenará este jueves en Fine Arts Cinema el documental fílmico “Candlelight”, inspirado en los estragos del huracán María.
El cortometraje, de ocho minutos de duración, estará en cartelera desde jueves 16 hasta el miércoles 22 en Miramar, previo a cada tanda de la película “Don’t Worry, He Won’t Get Far On Foot” del director Gus Van Sant.
Este medio alternativo conversó con la productora, actriz y cantante boricua, graduada de la Escuela de Comunicación Pública de la Universidad de Syracuse.
Verónica, que se encontraba en Puerto Rico cuando María devastó al archipiélago el 20 de septiembre de 2017, fue galardonada en 2015 con el Horizon Award por la excelencia del cortometraje de dos minutos “Y ya no te gustas”.
El reconocimiento consistió de un viaje a Sundance 2015 y la orientación de productores del cine emergente e independiente.

Al recibir una subvención de $5 mil para producir un documental sobre sus experiencias durante María, contactó a sus amigos y colegas Javier Enrique Delgado y Gilberto Vázquez Gómez, desarrollando “Candlelight”, que protagoniza Catherine Mercado Muñiz y que eventualmente no debiera sorprender si es nominado al Oscar en la categoría de cortometraje.
Jaime Torres Torres: ¿Cómo se puede sintetizar el trauma nacional de María en los ocho minutos de Candlelight?
Verónica Ortiz Calderón: “Está a disposición del público si en ocho minutos eso ocurre o se puede sintetizar. Es un trauma a nivel nacional y es difícil resumir cómo tienes a toda una nación y pueblo compartiendo un evento tan traumático. Pero pienso que en “Candlelight” no es tanto el énfasis en nuestro trauma, sino en lo que logramos a pesar de ese trauma y de los traumas vividos a través de los años con nuestro desafortunado estatus colonial. De una manera u otra hemos recuperado piezas y hemos logrado unir otras”.
JTT: ¿Qué recursos tuvo a su alcance?
VOC: “A mí me dieron un estipendio de $5 mil de parte de Horizon Award, una iniciativa en Hollywoord para impulsar a cineastas jóvenes, a pesar de la desigualdad que hay en Puerto Rico. Promocionando jóvenes cineastas como yo me dieron el estipendio que realmente es muy poco para realizar una producción cinematográfica. Adquirí equipo y contraté cuatro amigos del cine. Con una cámara, nos fuimos por los montes de Aguas Buenas a grabar. Luego edité desde mi computadora personal, enfrentando cortes de energía y falta de Internet, pero se logró”.

JTT: ¿Cómo ve la vida después de María?
VOC: “Incierta. Nosotros, los puertorriqueños, vivimos ahora en un estado de incertidumbre. Siempre describo que el huracán fue como una limpieza de cosas en Puerto Rico que estaban ocultas bajo una sombra putrefacta que nadie veía, pero estaban ahí. Ese viento hizo que se virara la tortilla y saliera todo a la luz en términos de ineficiencia gubernamental, de la corrupción y la falta de recursos en Puerto Rico. Pienso que cualquier tipo de confianza que podía tener el puertorriqueño en su gobierno la perdió. Estamos en un estado de incertidumbre de si en la próxima lluvia se inundarán las casas. Es muy triste para mí ver el efecto de cuando llueve que muchos no saben ni yo si vamos a estar bien con nuestras familias”.
JTT: ¿Qué impresiones tiene del cine como poesía para compartir su visión, en este caso, sobre los estragos de María?
VOC: “Para mí fue terapéutico. Pienso que cualquier cineasta puede coincidir conmigo de que el cine es terapia y ayuda a sanar heridas. Expuse los sentimientos que tenía amontonados dentro de mí y no podía hacer nada porque todos estábamos enfocados en el bienestar de la familia. Fue terapéutico. Es súper gratificante porque no solo ayuda a exponer el tema de María y llamar la atención hacia la situación, sino que también sirve de terapia colectiva”.