Por Javier Santiago
Fundación Nacional para la Cultura Popular
Llegaron desde temprano; justo antes del mediodía. Era un sábado soleado en plena Puerta de Tierra y el encuentro entre amigos y familiares se hacía en esta ocasión imperante y muy particular.

Como escenario estaba una capilla alterna de la Iglesia San Agustín. Y en ella el padre Toñito oficiaba una misa por la salud de dos boricuas que han ganado respeto en sus respectivos campos de acción: el pelotero Orlando “Peruchín” Cepeda y el músico Héctor “Atabal” Rodríguez.
Ya, de antemano se daba gracias por la recuperación que ha comenzado a evidenciarse en el caso de la gloria beisbolera del País. Pero tras el sentir de agradecimiento en la mejoría por el primero, en la pequeña Capilla, los buenos deseos y la energía vibrante de los presentes por la salud de Héctor “Atabal” impregnaba el ambiente.
Allí amigos y conocidos se mezclaron con figuras de la cultura, el deporte, la política y la comunidad como fueron los casos de Andy Montañez, Nelson Sambolín, Awilda Sterling, Carmen Nydia Velázquez, Jerry Medina, Ángel “Chucho” Quintero, Benito de Jesús, Douglas Candelario, Néstor Duprey,…
Ciertamente no se habló sobre la condición de salud de Héctor que ha sido discretamente guardada por la familia y que es respetada por todos a conciencia. En el mejor caso se compartió entre todos el deseo de enfrentar con “Atabal” el proceso que se avecina de manera optimista. Para ello ya están previstos los estudios y tratamientos indicados.
Héctor está dispuesto a seguir las instrucciones de los especialistas. Y en cada paso ya sabe que cuenta con la voluntad de lo Alto y el sentir solidario de toda la gente que lo quiere y no lo deja solo.
Así, los cantos, las lecturas, la liturgia de la misa oficiada por el padre Toñito fueron como una confirmación a ese sentir solidario con el fundador del grupo folklórico. Y en el apretón de manos compartido entre todos por la paz, se selló el pacto simbólico puesto en las manos del Todopoderoso.
El sacerdote agradeció al locutor Rafi Torres por esta iniciativa. Torres añadió a su vez que fue don Osvaldo Gil quien, en una de esas tardes de reuniones entre melómanos de la Calle Cerra, sugirió la idea como petición de la comunidad.

Al finalizar la misa, los abrazos y estrechones de mano se sucedieron nuevamente entre los presentes, llegando el sentir solidario hasta el propio folklorista.
Héctor caminó entonces hacia la salida, junto a su familia inmediata – María, Yajaira y Caymmi -, sabiéndose confiando porque no está solo en el proceso.
“Gracias a todos los amigos, amigas y mi familia que nos acompañaron en la misa ayer (sábado) en la capilla de la Iglesia San Agustín. La lista es larga y saben quiénes son.
“Gracias especiales a Rafi Torres, a don Osvaldo Gil y a todos los que se han preocupado por mi salud. Gracias a los que no pudieron asistir, muchos que no viven en Puerto Rico, pero que me han llamado para conversar. Me pueden seguir llamando…
“Gracias igual a mis amigos y amigas de FB por sus buenas vibras y oraciones me dan fuerza para lo que venga. María, Caymmi y Yajaira les estamos agradecidos”, apuntó hace unas horas Héctor “Atabal” en su cuenta de Facebook.
Si bien el sábado los deseos de recuperación fueron innumerables, los mensajes de apoyo que ha comenzado a recibir el músico y compositor han sido más que contundentes. Uno de ellos precisamente lo escribió el cantante y actor Jorge Arce al afirmar que “esta excelente y bella demostración ya constituye una fuerte cadena de oración”.