Por Luis Ernesto Berríos
Para Fundación Nacional Para la Cultura Popular
Con 60 años de carrera en la pintura y la música, el artista salinense, Osvaldo Dowell Colón, se define como “el rumbero pintor”, tras asegurar que siente la misma pasión por las dos ramas de las artes.

El pintor afroborinqueño, quien se ha destacado como retratista, percusionista y muralista, nació en el sector Aguirre de Salinas. Comenzó a relacionarse con las artes y la música a temprana edad, mientras estudiaba en la escuela elemental donde solia hacer dibujos númericos. Como no pudo decidir entre la pintura y el sonido de las congas creó un concepto innovador en el que combinó el elemento auditivo y visual.
“Me vuelvo cimarrón si no toco las congas, soy esclavo del tambor… lo que hice fue unir las dos artes. Para todas mis exposiciones me llevo la congas, las utilizo para atraer, con su ritmo, al público y así observen mis obras”, subrayó.
Dowell Colón afirmó que la música la llevaba en la sangre como una herencia de su padre William Dowell, nacido en Gibraltar, territorio británico.
“Mi padre era rumbero fue uno de los primeros bailarines de bomba en el area sur de Puerto Rico, para la década de 1940. Vino a trabajar como supervisor de cocina en el Hotel de la Central Aguirre de Salinas, se enamoró de mi madre Modesta Colón y se quedó en la Isla”, relató.

Para el inquieto pintor no poseer automovil no es obstáculo en su carrera, ya que utiliza la bicicleta como medio de transportación.
A lo largo de su carrera ha pintado alrededor de 800 obras en óleo sobre cambas, inspiradas en perfiles de destacadas figuras de las artes. “El pintor que pinta el cuerpo humano puede pintar todo lo que quiera porque es un trabajo bien dificil”, aseguró Dowell.
El reconocido artista de 68 años ha pintado la figura del padre de la cultura puertorriqueña e historiador, Don Ricardo Alegría; de los cantantes Cheo Feliciano, Ruth Fernández, Rafael Cortijo, Pedro Secundino Ortiz Dávila “Dávilita”, Andy Montañez y del maestro Catalino “Tite” Curet Alonso. Son estas sus pinturas favoritas.
“Conocí a Tite en la Plaza de Armas del Viejo San Juan. Era una persona humilde. Me acerque a él porque necesitaba una informacion sobre la Orquesta del Maestro Rafael Cortijo. Me respondio al instante porque era una enciclopedia ambulante”.

Anadió, “también le pregunté porqué la Orquesta de Plácido Acevedo popularizó en Puerto Rico el tema ‘Qué lindas mujeres tiene Mayarí’, (composición de Máximo Francisco Repilado Muñoz-Compay Segundo) si no tenemos ningun lugar con ese nombre, contrario a Cuba y México. El me contestó que Acevedo estuvo en Mayarí de México y que de alli salió la inspiracion para grabar el tema. Lo cantamos a duo, fue una experiencia única”.
Dowell Colón ha hecho seis pinturas diferentes de Don Tite Curet Alonso, una de estas engalana la sala principal del Centro de Convenciones, que lleva su nombre, en Guayama. Del mismo modo ha vendido cuatro de estas obras en presentaciones privadas y conserva dos en su colección personal.
Además, ha plasmado su arte en diferentes lugares públicos del Muncipio de Salinas. En el parque de pelota pintó los retratos de Roberto Alomar, exjugador de las Grandes Ligas; Zuleyka Rivera Mendoza, Miss Universo 2006; Angel “Cholo” Espada Mangual, excampeón Mundial del Boxeo en 1975 y Elizabeth Zayas Ortiz, Miss Puerto Rico 1976 y Miss Maja Internacional 1977, entre otros salinenses. Sus obras también adornan las paredes del Teatro Coqui y el mural de la plaza de recreo de la comunidad.

A pesar de que se considera uno de los pocos artistas puertorriqueños, que puede vivir de la pintura, contempla regresar a Estados Unidos donde vivió 36 años.
“Voy en busca de nuevas oportunidades y horizontes. Me siento un poco desanimado porque en Puerto Rico no se le da al artista el apoyo económico necesario, y en la colectivas de artistas siempre se resalta a los pintores de renombre”, denunció Osvaldo Dowell Colón.