Por Gabriela Ortiz Díaz
Para Fundación Nacional para la Cultura Popular
La bomba puertorriqueña se vistió de urbanismo con La Tribu de Abrante, agrupación que se propuso fusionar el sonido de instrumentos de viento con ritmos característico de la bomba, particularmente de la que se toca en Loíza, pueblo al cual orgullosamente representan los músicos. Así, en “Otro formato de música”, la primera producción discográfica de La Tribu, un rulé o un seis corrido están hermanados a la viva expresión del saxofón, la trompeta y el trombón.

Con solo dos semanas de estar en el mercado, el disco logró ocupar la primera posición en ventas en Puerto Rico y en las categorías Tropical Album y Rythm Album, según Nielsen Soundscan, compañía encargada de suministrar resultados de ventas producidas en los mercados de Estados Unidos y Puerto Rico.
Más allá de popularizar su estilo musical presentándose en muchos y variados escenarios a través de todo Puerto Rico, este junte de 11 músicos ha alzado la bandera cultural al mezclar en sus temas el barril y el yembé con otros instrumentos no usuales en este género. Desde el principio, la idea del proyecto fue difundir la bomba puertorriqueña de una manera distinta, pero manteniendo su esencia. En ese sentido, uno de los agradecimientos del disco está dirigido “a nuestro roble mayor, Don Rafael Cepeda”.
“Yo nunca pierdo la noción de que la base de mi grupo es la bomba”, ha asegurado Hiram Abrante, cabecilla y vocalista principal del grupo. Como exponentes jóvenes, buscan refrescar los ritmos de la bomba sin dejar de respetar y valorar este género emblemático de nuestra cultura. De esta manera, se han auto encomendado una gran responsabilidad: reafirmar públicamente la identidad nacional y racial de los puertorriqueños.
“No es fácil coger la bomba y la plena y convertirla en algo bien diferente a lo que estamos acostumbrados. Yo creo que hemos tenido auge por la necesidad musical y el hambre que la gente siente de aprender de la bomba y de nuestra cultura, pero a la misma vez porque traemos una propuesta bien refrescante y es la primera vez que el barril se escucha en la radio de manera continua”, expresó hace un tiempo en entrevista para la Fundación Nacional para la Cultura Popular el vocalista principal de la agrupación.
Recientemente, La Tribu presentó oficialmente el disco “Otro formato de música” en una actividad que convocó a muchos fanáticos. Al escuchar el producto final, queda evidenciado que dos propósitos fundamentales de La Tribu de Abrante son: “proyectar un grupo de bomba que pueda tocar en cualquier fecha del año, que pueda trascender, viajar y llevar el tambor de bomba a otros países y, además, llegar a los más jóvenes y a la gente que no le interesa la bomba”.
¡Qué suene el disco!
Con el pegajoso ritmo del tema “Yo no sé” inicia la travesía por los 13 sencillos que componen este nuevo CD, producido por White Lion Records Inc. y The Last Latin Records Inc. Esta fue una de las canciones que la agrupación fue lanzando esporádicamente como preámbulo y promoción del disco.

Un fragmento de la melodía del himno de Puerto Rico sale de un solo de trompeta, instrumento que se distingue en “Los pueblos”, segunda canción de “Otro formato de música”. En ella, Abrante y los coristas utilizan un pícaro juego semántico para enlazar en la lírica los nombres de varios pueblos de la Isla.
En el tercer tema, “No me soltaba”, el compás marca un merengue, pero los barriles siguen sonando de fondo. Seguido, se escucha la versión de “Bámbula” que produjo el refrescante grupo. A esta distinguida canción interpretada por muchos otros grupos de bomba puertorriqueña, los de la tribu le añaden metales y el seis corrido, ritmo loiceño que automáticamente motiva al baile.
“Yo sin tu amor” expresa una cadencia menos movida, pero manifiesta los atributos de la voz de Hiram Abrante. El próximo tema hace un paréntesis en el transcurso de la algarabía del disco porque narra la historia de José Enrique Abrante Edwards, hermano del vocalista que, aunque falleció en el 2004, constituye parte esencial de La Tribu.
La séptima canción, “Dale pa’ la calle”, fue la que los llevó a la popularidad masiva porque fue la primera que se transmitió en la radio nacional.
Luego de la güira que se escucha en la versión del reconocido merengue “Juanita Morel”, aparece uno de los temas más pegajosos del disco, “Mi María Luisa”, otro de los que sirvió de promocionar para el trabajo musical que han desarrollado.
El disco va llegando a su fin con la adaptación que hizo la tribu del tema “Bomba para afincar”, interpretado originalmente por Vico C. En esta ocasión, la fusión de instrumentos y la inclusión de metales rejuvenecieron el sencillo. Por último, “Brincando” cierra un disco que es alegría y reafirmación cultural.
Tal como pregona el apodado “cacique”, Hiram Abrante, la misión de La Tribu no o es minimizar nuestra cultura, sino llamar la atención de los que la desconocen o ignoran; ese proyecto se ha convertido en la aportación social y educativa de este grupo de músicos jóvenes.
El álbum, producido por Fernando López y el propio Hiram, está disponible en diversas plataformas digitales y físicamente también.