Por Jaime Torres Torres
Para Fundación Nacional para la Cultura Popular
La última grabación de Raphy Leavitt incluye una composición inspirada en las luchas por la liberación de Vieques del yugo de la marina de guerra estadounidense.

Quince años atrás, en 2001, el fenecido director de La Selecta escribió “La nena”, una analogía entre la mujer víctima de violencia doméstica y el maltrato ambiental al que por varias décadas fue sometida la Isla Nena.
La composición “La nena” es parte de las cinco obras que Raphy alcanzó componer para la grabación que resultó su despedida del pueblo latino, titulada “¡Hasta siempre!”
De seguro, “La nena” será una composición que dará mucho de qué hablar porque la Marina alega que no será hasta el 2030 en que finalizará las labores de limpieza del excremento bélico que yace en las aguas y sobre el suelo de la isla municipio.
“Supuestamente era un gran señor/que le daría a su nena
paz, amor y comprensión/y toda una vida buena.
Y fue tanta su insistencia/que hasta a mí me convenció
y así le entregué a mi nena/confiando en aquel varón.
Pero el tiempo transcurrió/y a su nena tierna y bella
la encontró achacosa, enferma/y ahora llorando le confesó:
‘No fue justo en su intención/ese vino a mí por interés
quiso en mi satisfacer/su deseo de dominación’.
Escúchame abusador/devuélveme ya a mi nena
que con tu engaño y tu traición
no has podido comprar su conciencia”.
“A él le dio mucho coraje el hecho de que continúa el abuso y el engaño. Dicen ‘que sí lo vamos a hacer’, pero como no viven allí no se perjudican. Se perjudican los viequenses y también los que visitamos la Isla Municipio”, señaló María Barreto, la viuda de Raphy Leavitt.
Otro detalle especial de la última grabación de Raphy Leavitt y La Selecta es la presencia de varios compases de la danza puertorriqueña en el arreglo de “Mi espina”. Hasta su muerte ratificó su compromiso con la cultura nacional.
“Le gustaba siempre mantener la música de Puerto Rico. Cuando estaba haciendo el arreglo con Isidro, Raphy le decía que deseaba una introducción y un final con la danza. A él le gustaba que la gente conozca un poco de dónde venimos”, explicó María.
Tras su fallecimiento en agosto pasado, la viuda ordenó y colocó bajo llave las últimas composiciones de Raphy, que de algún modo se hacían eco de la situación social que atraviesa la nación puertorriqueña, resaltando los valores familiares tradicionales.
“Raphy tenía muchos arreglos en la oficina. Cuando encontré el material inédito, lo que hice fue guardarlo en un archivo bajo llave. Sé que una de las canciones que deseaba incluir era una dedicada a nuestro hijo (el ingeniero Rafael Leavitt) en la que expresaba su orgullo por su hijo varón y cómo él fue evolucionando como joven y profesional adulto. Él estaba buscando perfeccionar la canción. Él escribía una base y luego buscaba las palabras adecuadas. Tocaba en el piano y eso le daba más inspiración. Todo lo guardé. Hay alrededor de una docena de canciones inéditas con sus melodías”.
Al momento de viajar a Estados Unidos para celebrar la Navidad y recibir el año 2016 junto a sus hijos Sheila y Rafael, María desconocía si La Selecta de Puerto Rico continuará activa.
“No es una decisión fácil. Le estamos dando vuelta al asunto todavía. Es una decisión que tomaré con mis hijos. Lo hablo todo con ellos y su sentir es muy importante. Raphy no se sentía tranquilo cuando, por razones de salud, la orquesta trabajaba sin él. Era muy celoso”.

Incluso, la señora María Barreto fue categórica al reiterar que “es la última grabación” y que al ser un “tema muy sensitivo para sí”, incluso, no garantiza que la orquesta pueda despedirse interpretando la obra postrera de Raphy.
“Cuando escucho la grabación es una nostalgia tan grande porque no solo pienso en los músicos y sus presentaciones, sino en la despedida en el Coliseo. Me da una nostalgia enorme al pensar lo mucho que Raphy trabajó en este proyecto y los planes que teníamos cuando regresáramos. Al todo esto quedar inconcluso, me da mucho dolor. Yo sé que él está viendo el fruto de esto y él está escuchando que lo están apoyando, pero me hubiera gustado ver sus expresiones de alegría. Por ejemplo, cuando Christian Nieves grabó el cuatro, Raphy quedó tan contento. Y el muchacho fue muy complaciente”.
A pocos días de la Navidad, la señora María Barreto le dirigió un mensaje a Raphy con la convicción de que, dondequiera que esté, lo escuchará. “Raphy sabe que hice la promesa de terminar su proyecto sin alterar nada de lo que estaba hecho. Mi compromiso fue terminarlo y promoverlo porque quiero que la gente sienta las vibraciones del disco. Ahí están sus últimos sentimientos, su último coraje porque su Puerto Rico ha cambiado. Las últimas expresiones de su corazón. Esa es mi promesa. No acostumbro a estar en los medios, pero lo hago porque prometí divulgar su legado”.
El legendario Sammy Marrero, cantante de la historia de casi 45 años de La Selecta, juró que hasta el día de su muerte Raphy vivirá en su recuerdo.
“Lo siento conmigo. Él fue mi amigo, mi compadre, mi consejero. Prometo ante Dios que mientras viva cantaré sus canciones, aunque sea para mí mismo. Porque vivirá para siempre en el corazón del País y de cada uno de nosotros”.
María, por su parte, aseguró que Raphy se despidió en las décimas de “Ruiseñor”, un canto a la reconciliación nacional. “Cuando uno piensa en todo lo que sucedió en el transcurso de este acontecimiento, pudiera ser. Aunque él la hizo pensando en Sammy, que es su ruiseñor y ha llevado el mensaje de sus canciones. Pensó: ‘ya Sammy está mayor y como nadie es eterno, a lo mejor se va’, pero no sabía que la despedida era la suya”.
Sammy, de 73 años, reconoció que el futuro de La Selecta solo lo saben Dios, María y sus hijos, Rafael y Sheila. Mientras pueda cantar, terminó diciendo, dará el máximo de su talento para honrar su legado de Raphy Leavitt.