Los talleres han sido intensos. El programa de actividades cargado y arduo. Pero dentro de lo apretado de la agenda del momento, un grupo de participantes del X Festival Internacional del Mimo y el Teatro Físico en el Caribe que, bajo la producción de Taller Teatro Polimnia se celebra en Puerto Rico, giró una visita a la sede de la Fundación Nacional para la Cultura Popular en el Viejo San Juan. Y en una noche de camadería conversaron, cenaron y compartieron experiencias de éste, su primer encuentro con Puerto Rico.
Ciertamente es el artista y mimo puertorriqueño Iván Olmo el eje de todos en esta primera visita al País. Así comienza el recuento con la francesa Anais André-Acquier, de la compañía Theattre L’écoutille, quien coincidió con Olmo en una muestra escénica en París. Allá fue que surgió la posibilidad de una participación en el Festival de Puerto Rico. Y tras las consabidas movidas burocráticas, la décima edición del Festival comenzó con una conferencia ilustrada de André –Acquier celebrada el pasado lunes 8 en el teatro Emilio S. Belaval de la Universidad del Sagrado Corazón.
La invitada francesa coincidió en dicha conferencia con el también mimo suramericano Ricardo Gaete de la compañía escena Física de Chile. Este artista escénico de extenso bagaje llegó al Festival por referencia y recomendación de un mimo argentino que endosó su trabajo. “Necesitábamos un latinoamericano en el taller y la recomendación fue Gaete”, comentaba Olmo durante la cena.
Al parecer, la química con todo lo boricua se dio casi de inmediato para el artista chileno que ha tenido maestros como Marcel Marceau, Angel Elizondo, Coninne Soum y Steve Wasson. Según contó durante su visita a la Fundación la magia se dio desde el mismo momento en que el vuelo se acercaba a Puerto Rico. “Hay algo maravilloso de ustedes y es la forma de ser. Desde que estaba en el avión, gente que no me conocían se ofrecían a llevarme alrededor de la Isla para que conociera el País. Y desde que iba bajando el avión me iban explicando cada lugar que se veía desde la ventanilla”, rememoraba el fundador de la compañía Escena Física de Santiago de Chile.
Para los australianos David Splatt y Gemma Lark, su encuentro con Puerto Rico se dio cual si fuera una cadena de eslabones. Según atestiguaban los miembros de la compañía Smallpox Theater de Australia fue Splatt quien primero conoció a Olmo en un festival en Polonia. La oportunidad de participar en el Festival de Puerto Rico se dio no sin antes darse una sugerencia: “Yo puedo ir y puede ser bueno; pero si Gemma Lark va conmigo puede ser mejor”, advirtió el joven Splatt al organizador del encuentro boricua.
La semilla de su idea cayó en suelo fértil. Y la oportunidad de presentarse en la décima edición del Festival en Puerto Rico se dio si mayores dificultades. Si bien viajar desde la tierra del “Downunder” a suelo boricua les tomó unas 30 horas de vuelo, lo cierto es que no se han arrepentido de la jornada. Si acaso se lamentan el que después de tanto viajar tan solo estén aquí por una semana.
No obstante, aunque la jornada no ha terminado, tan pronto llegaron se encontraron con una agradable sorpresa: fueron sus rostros los que ilustraron la portada de la revista Escena Boricua en su edición de abril.

Rodeados de los elementos y figuras de la cultura popular que se exhiben en al momento en la Fundación los participantes apreciaron fotos y memorabilia de figuras como Ricardo Alegría, Raúl Juliá y Julia de Burgos. Ante el recorrido por el salón principal y el patio el director ejecutivo de la organización, el periodista Javier Santiago, ofreció datos de figuras nacionales, muchas de ellas – como Rita Moreno, José Feliciano y Lin-Manuel Miranda – conocidas en los respectivos países de los visitantes por sus hazañas en la cultura. Recibieron con agrado música procedente del compacto “Guitarra campesina”; álbum del orocoveño Billy Colón Zayas que fuera seleccionado como una de las 20 producciones más sobresalientes del año. Y del mismo modo conocieron datos de la coreógrafa Leonor Costanzo, quien antes de fallecer el pasado marzo donó a la Fundación parte de su memorabilia que se exhibe en el vestíbulo de la estructura colonial.
Si bien el arte del mimo es corporal y silente, en la visita del jueves la conversación con los artistas visitantes se extendió hasta pasada la medianoche. Así se intercambiaron impresiones de todo tipo – desde lo cultural y social hasta lo turístico y político –. Y este ameno conversar entre amigos concluyó con una cena con elementos típicos de dos comercios del Viejo San Juan. Para los vegetarianos el menú ofreció un arroz natural confeccionado por el restaurante Verde Mesa. Para los de gusto amplio, arroz mamposteado acompañó las alternativas de lomitos de cerdo o pechugas de pollo en salsa de guayaba del restaurante Aromas en la calle Tetuán. Como cierre el postre se concentró en pequeños gustazos de la cocina boricua: panatelas de guayaba, merenguitos, bizcochos de chocolate, polvorones y galletas de mantequilla.
Así, tras horas de conversación y camaradería concluyó la visita de estos trabajadores de la escena internacional. Y con la promesa de asistir a las funciones que el X Festival Internacional del Mimo y Teatro Físico de Puerto Rico presenta este fin de semana en la Sala Carlos Marichal del Centro de Bellas Artes de Santurce quedaron los anfitriones de este ameno intercambio entre amigos.